jueves, 19 de mayo de 2011

Greenpeace reta al sector empresarial europeo a liderar una economía verde


Más de 160 activistas de Greenpeace se han encadenado a las puertas del centro de conferencias en el que se celebra la European Business Sumit (1) para “controlar” simbólicamente la entrada. Solo permiten el acceso al recinto a las empresas progresistas que apoyan que la UE asuma un compromiso de reducción de emisiones del 30% como paso previo para la transición hacia una economía verde; los activistas impiden la entrada en la reunión a los representantes de las empresas que están presionando a la UE para que no asuma un mayor compromiso de reducción de emisiones.


Greenpeace ha aprovechado que esta reunión del empresariado europeo se celebra bajo el título “Europe in the world: leading or lagging” (Europa en el mundo, liderando o retrasando) para resaltar el papel positivo que están jugando, en el ámbito europeo, algunas empresas y pedir a los representantes del resto de grandes compañías europeas que tomen ejemplo. En este sentido, la organización ecologista ha destacado el papel de empresas (2) como Acciona, Unilever, Danone, Sony, Deutsche Telekom y Allianz, que han pedido a los líderes europeos la adopción de un compromiso de reducción de emisiones del 30% para 2020, como forma de garantizar una trayectoria estable que permita planificar el panorama de inversiones necesarias para que la UE se sitúe a la cabeza de la economía verde y sea capaz de competir con la industria china y americana, las cuales ya están invirtiendo de forma considerable en tecnologías limpias y se han colocado a la cabeza de estos sectores modernos.

A pesar de las constantes pruebas de los beneficios que mayores objetivos de reducción de emisiones significarían para la industria europea, compañías como Microsoft, BP o Volkswagen siguen marcando el ritmo de la política climática de la UE y dificultando los avances hacia una economía verde.

“El sector de los negocios tiene una gran influencia en la clase política y no podemos permitir que sean los intereses de los sectores afines a los combustibles fósiles los que marquen la política europea. Es el momento de tomar ejemplo de las empresas que utilizan su influencia para impulsar decisiones políticas como el 30% de reducción de las emisiones de la UE para 2020, que no solo contribuyen a la lucha contra el cambio climático sino que aseguran el paso hacia la única economía posible en el futuro, la economía verde”, ha declarado Aida Vila, responsable de la campaña Cambio climático de Greenpeace.

Próximo Consejo Europeo de ministros de Medio Ambiente, en junio
El próximo mes de junio se celebra el Consejo Europeo de ministros de Medio Ambiente en el que va a discutirse la posibilidad de aumentar el actual objetivo de reducción de emisiones para 2020 del 20%. Varios estudios han expuesto que la adopción de un compromiso europeo de reducción de emisiones del 30% para 2020, además de contribuir a frenar el cambio climático, promovería las inversiones limpias en la UE y permitiría avanzar hacia una economía verde y aumentar el Producto Interior Bruto europeo en 620.000 millones de euros para 2020 (3). Los gobiernos de todo el mundo están pendientes de la UE para comprobar si aumenta su grado de ambición climática antes de la cumbre climática que se celebrará a finales de este año en Durban (Sudáfrica).

Este mes pasado, grandes marcas europeas como IKEA, Puma, MANGO o Sol Meliá se han sumado al movimiento de empresas progresistas que se manifiestan públicamente a favor de la innovación y el desarrollo verde, presionando para que la UE se comprometa a un 30% de reducción de emisiones.

En este sentido, Greenpeace pide al resto de empresas europeas que tomen ejemplo y se manifiesten públicamente a favor de un compromiso europeo de reducción de emisiones del 30% para 2020 que no solo marcará la trayectoria hacia un sistema productivo y económico que asegure la competitividad de la UE en un futuro sino que constituye el paso necesario para alcanzar el compromiso internacional de reducción de emisiones del 40%, indispensable para mantener el aumento de la temperatura global por debajo de los 2ºC.

http://www.greenpeace.org/





miércoles, 4 de mayo de 2011

Transporte y cambio climático: menos emisiones, mejor calidad de vida

¿Cuál es el enlace entre transporte y cambio climático? A nivel mundial, el transporte produce 23% de las emisiones mundiales de CO2. En América Latina, el sector de transporte es la principal causa de emisiones de CO2 dentro de las actividades que consumen energía, con un 35% del total. El transporte terrestre es causante del 90% de las emisiones del sector en la región, siendo un 50% producido por transporte de pasajeros y el resto por transporte de carga.

Frente a la alta tasa de urbanización de la región y el rápido aumento en el número de vehículos privados, se estima un fuerte crecimiento en las emisiones de gas de efecto invernadero causadas por el sector de transporte.

Los países de la región están tomando acciones para tratar de detener este crecimiento. Estas acciones se suelen clasificar como acciones de “Evitar-Cambiar-Mejorar”:

* Evitar la necesidad de viajar; es decir, reducir el número de viajes que se hacen
* Cambiar las modalidades de viaje a modos de transporte más sostenibles y con emisiones de carbono más bajas
* Mejorar la eficiencia de las modalidades de transporte

Lo interesante es que estas acciones no solo ayudan a reducir el crecimiento de emisiones, sino que también mejoran la calidad de vida de las personas. Por ejemplo, dado que el automovilismo privado genera gran parte de las emisiones, muchas ciudades han cambiado o están cambiando hacia un sistema de transporte público más integrado y de mejor calidad para cambiar a una modalidad más sostenible. (Curitiba y Bogotá son ejemplos obvios de ciudades que han transformado sus sistemas de transporte.)

También, planificadores urbanos o gerentes de transporte están haciendo planes integrados donde se consideran factores que van más allá del automóvil privado: aceras para los peatones; ciclovías para que la bicicleta sea una alternativa más segura y más atractiva; sistemas de BRT accesibles para todos, incluso para personas con discapacidades, personas mayores y niños. Menos emisiones también quiere decir menos contaminación en general, para mejores condiciones de salud para todos.

Con transporte sostenible ganan todos; ganan los seres humanos, gana el medio ambiente.

http://blogs.iadb.org/ - Eirin Kallestad